La histamina, el último neurotransmisor amina

Hemos hablado en este blog de la dopamina, la noradrenalina o norepinefrina, la adrenalina oepinefrina, componiendo ellas 3 las catecolaminas. Por otro lado, la acetilcolina y la serotonina. Todos ellos, como has podido comprobar en el nombre y en la estructura son aminas.


Solo, falta por mencionar a la última de este precioso grupo que hoy conoceremos más en profundidad, la histamina.

¿Quién es la histamina?

La histamina es una amina imidazólica involucrada en las respuestas locales del sistema inmunitario, regula funciones normales en el estómago y actúa como neurotransmisor en el sistema nervioso central.

Figura 1. Estructura de la histamina. Imagen extraída de: https://es.wikipedia.org/wiki/Histamina#/media/Archivo:Histamine.png

Nos centraremos en este papel de la histamina en el cerebro. En efecto, desde la década de 1950 se sabe que la histamina está en el cerebro, pero hasta hace poco se desconocía su función. Esto se debió principalmente, a las muchas funciones que tenía fuera del sistema nervioso.

La histamina es sintetizada y liberada por neuronas del sistema nervioso, que la usan como neuromodulador. Fuera del sistema nervioso central es un mediador de procesos fisiológicos en células cebadas del tejido conectivo, y en los leucocitos, basófilos y eosinófilos.

¿Cómo se sintetiza?

La histamina es una amina compuesta por un anillo imidazólico y un grupo etilamino como cadena lateral. Químicamente, llamada como 2-(4-imidazol) etilamina y su fórmula es C5H9N3 (ver Figura 1).

Por ello, podemos decir, que la histamina es el producto de la descarboxilación del aminoácido histidina, una reacción catalizada por la enzima L-histidin descarboxilasa.

Figura 2. Síntesis de la histamina en los distintos organismos. Imagen extraída de: http://farmacialasfuentes.com/index.php/receptores-de-histamina-de-la-teoria-a-la-terapeutica/

Una vez formada, la histamina es almacenada o es rápidamente inactivada por el sistema digestivo. La histamina es catabolizada por la histamina-N-metiltransferasa y la diamina-oxidasa, y posiblemente sea capturada por algún transportador, que aún no se ha identificado. Algunas formas de intoxicación alimentaria, se deben a la conversión de histidina en histamina en la comida descompuesta o mal refrigerada, como el pescado.

Las neuronas que sintetizan y liberan histamina son las del núcleo tuberomamilar y el núcleo posterior del hipotálamo. En ellas, no se ha identificado un sistema de transporte específico para neuronas histaminérgicas. Una vez sintetizada, se introduce en vesículas y saldrá estimulada por el calcio.

No obstante, fuera del sistema nervioso, los mastocitos y las células del endotelio vascular también sintetizan y almacenan histamina.

¿Cómo se regula?

La histamina también tiene un control negativo de su propia síntesis, es decir, que se autorregula, a través de autorreceptores H3C, que activan la recaptación de este neuromodulador, en axones, dendritas y células gliales. Hay dos enzimas que participan en el catabolismo de la histamina, que son la histamina metil-transferasa (HMT) del sistema nervioso central y la diamino oxidasa (DAO) del resto del cuerpo.

Funciones de la histamina

Las funciones de la histamina se pueden dividir en: funciones como neurotransmisor y funciones en el resto del cuerpo.

Funciones como neurotransmisor

La histamina puede actuar como neuromodulador, modulando o regulando las respuestas a otros neurotransmisores. Se han observado interacciones de la histamina con la acetilcolina (de la cual ya hemos hablado), opiáceos, GABA (de la que hablaremos).


Figura 3. El encéfalo y las rutas de la histamina en él.. Imagen extraída de: https://repositorio.cinvestav.mx/bitstream/handle/cinvestav/3329/SSIT0015259.pdf?sequence=1

La histamina en general es un neuromodulador que incrementa la excitabilidad de las neuronas del sistema nervioso central. Además, como neuromodulador regula las funciones hipotalámicas, relación vigilia/sueño, y actualmente está en estudio si hay funciones vegetativas en las cuales quizás también juegue un papel importante (control de la presión sanguínea, regulación de glucosa y lípidos, la regulación del consumo de líquidos, temperatura corporal y secreción de hormona antidiurética, así como la percepción del dolor).

Por un lado, su papel en funciones fisiológicas se ha pensado que la histamina juega un papel en enfermedades degenerativas (esclerosis múltiple, Alzheimer, Parkinson). Por otro lado, se cree que la enfermedad del Parkinson es una enfermedad multi-factorial, y en ratas con esta patología se ha observado un aumento en la liberación de metabolitos de la histamina.

Por todo ello, posteriormente se ha demostrado que la histamina está envuelta en la degeneración neuronal y neurotoxicidad. Por ejemplo, la encefalopatía de Wernicke es un desorden caracterizado por daño patológico selectivo en la línea media del tálamo, cuerpos mamilares, y ciertos núcleos cerebrales. En efecto, la deficiencia de tiamina es un factor crítico en la etiología de este desorden, que se ha demostrado que presenta mucha histamina, provocando su exceso, la muerte de las neuronas.

Finalmente, en el sistema nervioso, unido a la función del sistema inmune en el que la histamina es la unión, destacan las muchas enfermedades inflamatorias del Sistema Nervioso Central tales como encefalomielitis y esclerosis múltiple.

Funciones en el resto del cuerpo

La histamina interviene decisivamente en las reacciones de hipersensibilidad inmediata y alérgica, es decir, en la alergia. Esto se debe a que, como​ parte de la respuesta alérgica a un antígeno se generan anticuerpos (IgE), contra antígenos inhalados normalmente, ​ que se unen a la superficie de las células cebadas y los basófilos.

La histamina está considerada como un modulador tanto de la respuesta inmune humoral o innata, como de la inmunidad celular o adaptativa, así como el mayor mediador de reacciones de hipersensibilidad inmediatas.

En el corazón o sistema cardiovascular la histamina es un vasodilatador con interacción mediante los receptores H1 y H2, que se encuentran en todos los vasos sanguíneos. Por un lado, los receptores H1 tienen más afinidad por la histamina y medían la dilatación por el óxido nítrico cuyo comienzo es rápido y leve. Por otro lado, los receptores H2 que estimula la vía adenosín monofosfato cíclico (AMPc) – proteinquinasa A en músculo liso, originando una dilatación que surge con más lentitud y dura más tiempo.

Si se aplica a dosis grandes o es liberada durante una anafilaxia, la histamina ocasiona disminución profunda de la presión arterial. Por ello, con la dilatación de los vasos finos, se atrapan gran cantidad de sangre, aumenta la permeabilidad y sale plasma de la circulación, y por tanto disminuye el volumen sanguíneo eficaz, el retorno venoso y el gasto cardíaco.

En los vasos sanguíneos más grandes, controla por ello, la permeabilidad. Destacando que retarda la conducción auriculo – ventricular (regulado por los receptores H1), intensifica el automatismo y con altas dosis puede haber arritmias (siendo estos dos últimos, mediados por los receptores H2).

Figura 4. Receptores de histamina y su relación en el organismo. Imagen creada por Ammu en Canva.


La histamina es un potente secretagogo gástrico y desencadena excreción abundante de ácido, siendo la fuente principal del organismo, por las células parietales (donde junto con la gastrina y la acetilcolina, produce H+), al actuar en los receptores H2. También aumenta la producción de pepsinogeno y factor intrínseco, manteniendo el equilibrio y ácido necesario para la digestión.

En último lugar, hay que mencionar que los receptores de histamina, los H3 parece que tienen un importante papel en su localización presináptica (núcleos basales, hipocampo y corteza) regulando la síntesis de histamina y otros neurotransmisores. Mientras los H4 están en las células inmunitarias y de origen hematopoyético como los eosinófilos y los neutrófilos, y también en las vías gastrointestinales, activando el sistema inmune.

Conclusión

En conclusión, la histamina es un neuromodulador fundamental para nuestras conexiones cerebro – intestino, como vimos con la serotonina. Así mismo, es esencial en el sistema nervioso central, como hemos visto en estas líneas. Además, es esencial para diversas funciones inmunitarias y nos mantiene en la homeostasis o equilibrio estomacal.

Aún, queda mucho por descubrir en este neurotransmisor, pero espero que estas líneas os guíen un poco más, y os hayan hecho descubrir un nuevo mundo, el de las aminas, que se cierra aquí, aunque no el mundo de los neurotransmisores que aún quedan unos pocos por contar.

 Artículo escrito y editado por Ana María Morón Usero. Ammu.

Os recomiendo los glosarios de Neurociencia y leeros los artículos que han dejado los colaboradores... tenéis temas de sobra.

Bibliografía

·       Bebo B. F. Jr., Yong T., Orr E. L., & Linthieum D. S.; 1996. Hypothesis: a possible role for mast cells and their inflammatory mediators en the pathogenesis of autoimmune encephalomyelitis. J. Neurosci. Res. 45, 340-348.

·       Galli, S. J.; 1993. New concepts about the mast cell. N. Engl. J. Med. 328, 257-265.

·       LAURENCE BRUNTON, JOHN LAZO, KEITH PARKER Goodman & Gilman. Bases Farmacológicas de la Terapéutica. 11º Edicicion. Edición Mc Graw Grill

·       KATZUNG, BERTRAM G. Farmacología Básica Y Clínica. 8.ª Edición. Manual Moderno año 2002

·       Normas sanitarias aplicables a la producción y a la puesta en el mercado de los productos pesqueros. Directiva 91/493 CEE, No. L 268, 22.07.1991, Official Journal of the European Communities 24.09,1991.

·       Prell G.D. & Green J. P.; 1986; Histamine as a neuroregulator. Annu Rev. Neurosci. 9, 209-254.

·       Schwartz, J. C., Arrang, J. M, Garbarg M., Pollard H., & Ruat M; (1991) Histaminergic transmission in the mammalian brain. Physiol. Rev. 71, 1-51.

·       Summer, S.S.; Taylor S.L. Detection method for histamine-producing, dairy-related bacteria using diamine oxidase and leucocrystal violet, J. Food Protect, 1989. 52:105-108

·       Thoburn K. K., Hough L. B., Nalwalk J. W., & Mischler S. A.; 1994; Histamine induced modulation of nociceptive response. Pain 58, 29-37.

·       Vizuete, M.L., Merino, M., Venero, J. L., Santiago, M., Cano, J. & Machado, A.; 2000. Histamine infusion induces a selective dopaminergic neuronal death along with an inflammatory reaction in rat substantia nigra. J. Neurochem. 75, 540-552.

·       Wahl M., & Schilling, L.; 1993. Regulation of cerebral blood flow -a brief review. Acta Neurochir. Suppl. (Wien) 59, 3-10.


Comentarios

Entradas populares de este blog

LA ENSEÑANZA DE LA CIENCIA A TRAVÉS DE MARIA MONTESSORI

Biruté Galdikas, la mujer de los orangutanes

Día Mundial del Algodón: 7 de octubre

Saccharomyces cerevisiae: una levadura presente en el vino capaz de producir serotonina

Plasticidad cerebral, ¿qué es?